Haciendo un poco de referencia a aquellas camas de hotel, donde a veces nos sentimos tan cómodos y por las cuales a podríamos pagar sumas impensables para dormir, sin importar que las personas que durmieron ahí anteriormente fueran de nuestro agrado. Siempre podríamos decir yo jamás dormiría en la misma cama que durmió fulano… pero, hasta que punto es esto cierto?
Esta instalación nos propone una reflexión en torno a aquellos espacios íntimos que asumimos como privados y que se van convirtiendo progresivamente en parte de lo público y compartido. Se trata un poco de jugar con la idea de aquella historia escondida detrás de los objetos con los que nos relacionamos en el día a día.
Por otro lado está el tema del sueño, el sueño que a veces (in)voluntariamente nos lleva a lugares desconocidos, en situaciones impensadas y a lo mejor con gente no deseada.
Patricia Grassals usa como medio el diseño de modas, la manipulación de textiles con la instalación y el arte acción, para comunicarnos como cosas tan íntimas pueden pasar en algún momento al macro y volverse del dominio público.
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