Texto y fotos Franklin Guerrero
Esto parecería un cuento infantil, una reina visita un país pobre y desciende a un lugar donde la pobreza perdió su nombre y ahora se llama miseria. El personaje monárquico decidió caminar entre el lodo, las piedras y las miradas sorprendidas.
En el momento que menos se esperaba, apareció él. Un perro viralata, vestido de amarillo y negro….Pero tenia un problema no hablaba, y si ladraba –lo que sabe hacer- iba a ser pateado por personeros de la seguridad. Tomo la decisión de no molestar y camino hacia las piernas de la reina, las que no le llamaron la atención y mucho menos las del alcalde-banquero Juancito.
Después de haber emprendido la caminata, atravesó el laberinto de piernas de los visitantes que no volverán. (La histora completa mañana en Nuria)
1 comentarios:
caramba no acostumbro a dejar comentarios a pesar d ser un webnauta de long time pero la verdad q este dominican terrier es un colao colao de a duro porque muchos de seguro hubieran querido haberse dado esa vitrina con la Reina....pila de politicos y pelafustanes.....ese perro vira(latas) (tanques)(funda negra) es todo un montro al infiltrarse en semejante multitud ahora bien es todo lo opuesto ya que la Reina fue la que penetro en la zona viralatense.......debemos estar orgullosos de los perros viralatas....que como la sociedad dominicana, no come sica porque quiere sino por la necesidad....es cuanto.
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